La telemetría es una potente tecnología inalámbrica que se utiliza para recopilar, transmitir y analizar datos a distancia. Desempeña un papel crucial para hacer más eficientes los sistemas de monitorización y control.
Asegurar un rendimiento óptimo de la red en infraestructuras de TI, habilitar la el seguimiento en tiempo real en la atención sanitaria, transmitir datos medioambientales como la temperatura y humedad a las centrales meteorológicas, proporcionar información a las agencias espaciales sobre el estado de los satélites, las naves espaciales y aeronaves: la telemetría ayuda a las organizaciones de diversos sectores a tomar decisiones fundamentadas y basadas en datos. Pero ¿qué es exactamente la telemetría y cómo funciona?
Breve introducción a la telemetría
La telemetría es el proceso automático mediante el cual se recopilan datos de fuentes remotas y se transmiten a un sistema central, donde se analizan y monitorizan.
El término telemetría proviene del francés «télémètre», que se compone de «télé», que significa «lejos», y «mètre», que significa «medidor» o «dispositivo de medición». A su vez, «télémètre» tiene sus raíces en las palabras griegas «tele» (lejano) y «metron» (medida).
Los primeros dispositivos telemétricos se pueden encontrar en 1763 con los medidores de presión de mercurio y en 1800 con el telégrafo de Morse. En 1912, la telemetría se utilizó para la monitorización de plantas eléctricas. Después de la Segunda Guerra Mundial, se generalizó su uso y experimentó una fuerte evolución durante la Guerra Fría.
Ya en la década de los 60 del siglo pasado, los sistemas avanzados permitieron la transmisión selectiva de datos a través de unidades centrales. Hoy en día, la telemetría está impulsada por los avances en la nube, el Internet de las cosas (IoT) y el seguimiento en tiempo real.
¿Cómo funciona la telemetría?
Para generar valor a partir de los datos de la telemetría, primero es esencial identificar los requisitos de monitorización y definir los formatos de los mensajes para garantizar una comunicación fluida entre todos los sistemas involucrados.
A continuación, se configura la instrumentación integrando y configurando el sistema de destino, según el esquema definido para los eventos clave. La correcta validación de los datos es crucial: la información sensible debe manejarse de acuerdo con las políticas de privacidad y seguridad de la empresa.
El proceso de telemetría se desarrolla en tres fases clave: recopilación de datos, transmisión y análisis.
- Recopilación de datos: sensores o dispositivos integrados en sistemas, vehículos o infraestructuras recogen información vital como métricas de rendimiento, condiciones ambientales o indicadores de integridad del sistema.
- Transmisión: los datos recopilados se transmiten de forma inalámbrica o a través de una red a un sistema central. Esta fase puede llevarse a cabo utilizando diversas tecnologías de comunicación, como Wi-Fi, redes móviles o enlaces por satélite.
- Análisis: Una vez que los datos llegan al sistema central, se procesan y analizan para proporcionar información útil. Un análisis de este tipo puede ayudar a las organizaciones a monitorizar el rendimiento, detectar anomalías y activar alertas.
En entornos modernos, los sistemas de telemetría están basados en la nube, lo que permite el acceso a los datos en tiempo real desde cualquier lugar. Con la integración de dispositivos IoT y funciones de monitorización en tiempo real, la telemetría se está volviendo indispensable en sectores donde se requiere supervisión continua y respuestas inmediatas.
Tipos de sistemas de telemetría
Los sistemas de telemetría están disponibles en varias formas, cada una diseñada para cumplir unos requisitos específicos según el contexto y su aplicación.
- La telemetría inalámbrica: los datos se transmiten a través de ondas de radio o comunicaciones vía satélite, comúnmente utilizadas en aplicaciones donde el cableado físico no es factible, como sensores remotos o misiones espaciales.
- La telemetría por cable: los datos se transmiten a través de cables o redes físicas, ofreciendo conexiones seguras en entornos como fábricas o centros de datos, donde las conexiones directas son posibles (y a menudo preferibles).
- La telemetría integrada: los sistemas de telemetría están integrados directamente en dispositivos o máquinas, como vehículos, maquinaria industrial o infraestructuras de TI, lo que permite la monitorización y control en tiempo real de sistemas críticos.
Sectores de aplicación
El tamaño del mercado global de la telemetría, valorado en 116,85 mil millones de dólares en 2020, crecerá según las previsiones hasta superar los 202 mil millones en 2028, con una tasa de crecimiento del 7,68% en el período 2021-2028. Los campos de aplicación son numerosos, tres de los cuales ofrecen perspectivas especialmente interesantes.
- Sanitario: la telemetría es fundamental en los sistemas de monitorización de pacientes. Dispositivos como monitores de frecuencia cardíaca y dispositivos médicos portátiles recopilan datos en tiempo real, lo que permite a los médicos hacer un seguimiento a los pacientes a distancia y responder rápidamente a emergencias.
- Automoción: la telemetría se utiliza para monitorizar el rendimiento del vehículo, el consumo de combustible, los datos de GPS y los sistemas de conducción autónoma. Gracias a los datos obtenidos de esta manera, los fabricantes de automóviles pueden mejorar la seguridad y la eficiencia de los vehículos que producen y predecir las necesidades de mantenimiento.
- TI: en el sector de TI, la telemetría desempeña un papel crucial en la monitorización del rendimiento del sistema, el estado de la red y el uso de aplicaciones, garantizando operaciones fluidas y eficientes. Gracias a la recolección continua de datos de varios sistemas de TI, la telemetría permite obtener información en tiempo real sobre el rendimiento del hardware, el tiempo de actividad del servidor, el ancho de banda de la red y el comportamiento de las aplicaciones. Este flujo constante de información ayuda a los equipos de TI no solo a detectar y resolver problemas rápidamente, sino también a evitar que se agraven.
Telemetría en TI y más allá
Entre los sectores de aplicación de la telemetría, el de TI merece una mención especial. Aquí, la telemetría está estrechamente relacionada con la observabilidad, un enfoque que va más allá de la supervisión y ofrece una comprensión más profunda del comportamiento del sistema a través de los registros, métricas y trazas.
La observabilidad no puede definirse tanto como una operación específica —la supervisión, en este caso— sino como una característica distintiva del sistema que permite gestionar la complejidad.
Los datos de telemetría favorecen la observabilidad, pero por sí solos no hacen que un sistema sea observable. Solo cuando se combinan con análisis mediante inteligencia artificial, se vuelven aún más poderosos. Una vez procesados por algoritmos de aprendizaje automático, ayudan a predecir posibles problemas, optimizar la asignación de recursos y proporcionar respuestas automáticas a las anomalías detectadas.
Ejemplos de uso claves
La telemetría desempeña un papel fundamental para garantizar el funcionamiento eficiente de la infraestructura de TI. Los tres principales ejemplos de uso son:
- En la monitorización de red: la telemetría ayuda a rastrear el uso del ancho de banda, identificar cuellos de botella en la red y optimizar el rendimiento, garantizando operaciones fluidas y eficientes.
- En la infraestructura de la nube: la telemetría monitoriza los servicios basados en la nube como son las máquinas virtuales (VM), los sistemas de almacenamiento y las aplicaciones, asegurando su funcionamiento óptimo y seguro.
- En la supervisión del rendimiento de aplicaciones: al monitorizar el comportamiento de las aplicaciones, la telemetría ayuda a optimizar la experiencia del usuario y garantizar la seguridad de las aplicaciones.
Beneficios
En general, al ofrecer una visión holística de la infraestructura de TI, la telemetría permite a los equipos de TI mejorar el rendimiento general, garantizar la seguridad y mantener altos niveles de seguridad y cumplimiento.
Los beneficios son cuantiosos y abarcan múltiples sectores:
- Seguimiento en tiempo real: con la telemetría, los sistemas pueden ser monitorizados en tiempo real, lo que permite la detección rápida de problemas, reduciendo el tiempo de inactividad y mejorando la seguridad.
- Mantenimiento proactivo: los datos de telemetría pueden identificar posibles problemas antes de que se vuelvan críticos, lo que permite un mantenimiento predictivo y evita fallos costosos.
- Decisiones basadas en datos: los datos recopilados a través de la telemetría proporcionan a las organizaciones una serie de conocimientos que les permiten optimizar el rendimiento, tomar decisiones informadas y mejorar la eficiencia.
- Automatización: la telemetría puede activar respuestas automáticas a anomalías o condiciones predefinidas, reduciendo la necesidad de intervención manual y mejorando la eficiencia operativa.
- Seguridad: al monitorizar los patrones de acceso, la telemetría ayuda a identificar actividades sospechosas y proporciona alertas en tiempo real sobre la existencia de posibles amenazas.
Tecnologías clave para la telemetría
Varias tecnologías son esenciales para dar servicio a los sistemas de telemetría actuales:
- Los dispositivos IoT: estos dispositivos actúan como sensores, recopilando datos en tiempo real de máquinas, entornos o sistemas e introduciendo esos datos en plataformas de monitorización centrales.
- La nube: las plataformas en la nube almacenan y analizan grandes cantidades de datos, ofreciendo escalabilidad, accesibilidad y capacidad de procesamiento para manejar información en tiempo real.
- El aprendizaje automático y la inteligencia artificial: los sistemas basados en inteligencia artificial analizan los datos telemétricos para proporcionar información predictiva, automatizar respuestas y optimizar el rendimiento.
Desafíos y consideraciones sobre la telemetría
Si bien las oportunidades de crecimiento son definitivamente prometedoras, la implementación de sistemas de telemetría conlleva algunos desafíos:
- La sobrecarga de datos: el enorme volumen de datos recopilados a través de la telemetría puede ser abrumador. Para poder extraer información valiosa, será indispensable contar con soluciones confiables de análisis y gestión de datos.
- La privacidad y seguridad: garantizar que los datos telemétricos se transmitan y almacenen de manera segura es fundamental, especialmente cuando se trata de información sensible o confidencial.
- La integración con los sistemas existentes: implementar la telemetría en sistemas heredados puede ser complejo y, a menudo, requiere una planificación cuidadosa para garantizar una transición fluida y sin interrupciones.
Por qué la telemetría es importante hoy
La telemetría es una tecnología fundamental en el mundo hiperconectado de hoy, ya que permite a las organizaciones supervisar sistemas, prever problemas y tomar decisiones basadas en datos.
El futuro de la telemetría estará moldeado por las tendencias que ya estamos experimentando. Por ejemplo, el auge del edge computing: al procesar los datos más cerca de la fuente, será posible reducir la latencia y mejorar las respuestas en tiempo real. O los avances en inteligencia artificial y aprendizaje automático, que mejorarán aún más la capacidad de proporcionar información predictiva y automatización.
Nuestra previsión está firmemente arraigada en el presente: la importancia de la telemetría crecerá a medida que las empresas busquen mejorar la eficiencia, la fiabilidad y el rendimiento.
Preguntas Frecuentes
¿Qué es la telemetría?
La telemetría es una tecnología que recoge, transmite y analiza datos de forma remota y se utiliza para monitorizar y controlar sistemas en tiempo real.
¿Cómo funciona la telemetría?
La telemetría recopila datos mediante sensores, los transmite a un sistema central y los analiza para proporcionar información útil y detectar problemas.
¿En qué sectores se utiliza la telemetría?
La telemetría se utiliza en el sector de TI, sanitario, automovilístico, aeroespacial y muchos otros para monitorizar el rendimiento, mejorar la seguridad y prevenir fallos.